Con lágrimas en los ojos y una sinceridad inexplicable Britney Spears realizó impactantes confesiones en su nuevo documental para MTV, Britney: For the Record.
"¿En qué demonios estaba pensando?", se pregunta al hablar de su reciente pasado: un año en que se divorció, provocó escándalos públicos con la policía, se rapó la cabeza y fue internada en un centro psiquiátrico.Y es que a pesar del éxito que está volviendo a tener la princesa del pop, no todo es felicidad y confiesa entre lágrimas: "No hay ilusión en mi vida. No hay pasión. Hay días realmente buenos, pero luego están los malos. Incluso cuando estás en la cárcel sabes que en algún momento saldrás de allí"."Pero en esta situación", continúa, "siento como si nunca fuera a terminar. Es como el día de la marmota, todos los días lo mismo". Y agrega: "Es que es demasiado control. Si no estuviera bajo las restricciones que vivo, me sentiría liberada. Cuando hablo de cómo me siento es como si me oyeran, pero realmente no están escuchando"."Si haces algo mal en tu trabajo, puedes arreglarlo y seguir adelante", se queja Britney. "Pero yo estoy teniendo que pagar por lo que he hecho durante demasiado tiempo. Y no quiero convertirme en una prisionera... siempre he querido sentirme libre".
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario